Hiperplasia prostática y la cirugía urológica Rezum

La hiperplasia prostática benigna es una afección que provoca el agrandamiento de la próstata, una condición común entre los hombres de más de 45 años de edad. El Dr. PhD. Fernando Abarzúa, cirujano urólogo, explica que en la actualidad existe una innovadora técnica quirúrgica, que ya se está implementando con éxito en el Sanatorio La Costa, y que permite la preservación de la función eyaculatoria. Se trata de la cirugía urológica Rezum.

La glándula prostática se encuentra debajo de la vejiga. El conducto que transporta la orina desde la vejiga hacia el exterior del pene (uretra) pasa por el centro de la próstata. Cuando la próstata se agranda, comienza a obstruir el flujo de orina.

La mayoría de los hombres presentan un crecimiento continuo de la próstata a lo largo de la vida. En muchos, este crecimiento continuo agranda la próstata lo suficiente como para provocar síntomas urinarios o para obstruir considerablemente el flujo de orina.

Existen varios tratamientos eficaces para el agrandamiento de la glándula prostática, entre ellos, medicamentos, terapias mínimamente invasivas y cirugía. Para elegir la mejor opción, el paciente como el médico deben considerar los síntomas, el tamaño de la próstata, otros trastornos de salud que pueda tener y sus preferencias.

La técnica Rezum

Consiste básicamente en la instalación de vapor de agua dentro de la glándula prostática, obteniéndose de esta forma la ablación de la misma y preservación de la función eyaculatoria; indicada para pacientes con hiperplasia prostática benigna, clínica y objetivamente sintomática, que provoca cuadros urinarios molestos como el bloqueo del flujo de orina de la vejiga, o problemas de vejiga, vías urinarias o riñón.

Con esta cirugía se garantiza un resultado satisfactorio, con posoperatorio sin mayores complicaciones, y alivio sintomático diario.

Características

El Rezum se lleva a cabo por vía transuretral (cirugía que se realiza con un instrumento especial que se introduce por la uretra). Consiste en la inyección de vapor de agua directamente en el tejido hiperplásico que provoca la obstrucción y los síntomas. De esta forma, se produce la destrucción de esa parte de la próstata que el organismo sustituye por un tejido cicatricial. El resultado final es un aumento del calibre de la uretra que mejora el flujo y la calidad miccional.

Esta técnica de vapor de agua para la próstata es sencilla y se realiza de forma ambulatoria, bajo sedación profunda. El paciente es dado de alta en unas horas con una sonda vesical, durante un período de tres a siete días, en función del tamaño de la próstata, los síntomas previos y la mayor o menor extensión de la zona tratada.

Seguidamente, debe mantenerse el tratamiento farmacológico durante un período aproximado de tres meses. Por su mecanismo de acción, no pone en riesgo ni la continencia urinaria ni la calidad de las erecciones.

Preoperatorio

Para llevar a cabo la técnica Rezum, primero se proveerá una indicación formal de la cirugía, ante la respuesta pobre o efectos adversos asociados a la medicación para el tratamiento de la hiperplasia. Además, se considerará que el tamaño de la glándula prostática se encuentre entre 30-80 gramos. También se deberá completar la evaluación clínica y laboratorial preoperatoria, y por último, contar con la autorización clínica.

Beneficios

El mayor beneficio de la técnica Rezum es que es ambulatorio, es decir, posterior a unas horas de la cirugía, el paciente puede regresar a su casa para recuperarse en la comodidad de su propio hogar. Es un procedimiento ligeramente abreviado, con una recuperación y reinserción laboral rápida y forma parte de las técnicas innovadoras, cuya mayor fortaleza es que son mínimamente invasivas y permite mantener las funcionalidades del órgano intactas.

Dr. PhD. Fernando Abarzúa

Cirujano Urólogo | Reg. N.° 5149